Septiembre 11 de 2017
Amigos de la Tierra de América Latina y el Caribe -ATALC- repudia la judicialización de los estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras -UNAH, que se efectuó el sábado 9 de septiembre en Tegucigalpa, capital del país mesoamericano. El proceso de judicialización se llevó a cabo luego de que los estudiantes, entre ellos Yunior Alexander Oyuela -colaborador del Movimiento Madre Tierra / Amigos de la Tierra Honduras- fuesen capturados el 8 de septiembre mientras ejercían su legítimo derecho a la protesta pacífica en las instalaciones de dicha Universidad.
Como organización ambientalista que trabaja por la justicia ambiental, social y de género, además de presentar públicamente nuestro repudio y rechazo al proceso de judicialización contra los/as luchadores/as sociales en Honduras, manifestamos nuestra alarmada preocupación por los sistemáticos ataques en contra del pueblo hondureño con prácticas de criminalización que violan los derechos colectivos de los pueblos y sus derechos humanos, y reflejan la construcción de una política policial-militar persecutoria y punitiva.
La detención y judicialización del compañero Yunior Alexander Oyuela y de los demás estudiantes en la UNAH es una más de las irregularidades que atentan contra los derechos del pueblo hondureño, y que en los últimos años ha convertido a Honduras en uno de los países más peligrosos en la Región para realizar actividades en pro de los derechos humanos, de la defensa de los territorios y, en términos generales, de defensa de la vida digna de las comunidades campesinas, indígenas, garífunas y urbanas.
La detención y judicialización de los y las compañeras ha sido rechazada por cientos de organizaciones y movimientos populares de diversas partes del mundo, quienes sin lugar a dudas estaremos en continuo seguimiento al proceso que se pretende adelantar desde ejercicios de represión judicial en el intento de acallar las voces de hombres y mujeres jóvenes que reclaman cambios estructurales en Honduras, y que en su legítimo derecho se oponen a la privatización de la educación pública, otro de los bienes comunes convertido en mercancía bajo los preceptos del neoliberalismo que impone la definición de la política pública hondureña.
Instamos al gobierno de Honduras a que atendiendo al llamado de justicia que se ha desplegado internacionalmente a raíz de estas nuevas irregularidades, revierta el proceso de judicialización que injustamente se adelanta en contra de Yunior Alexander Oyuela y los/as demás estudiantes; consideramos que el camino para la resolución de los conflictos no puede estar marcado por la amenaza permanente a la libertad, como método de amedrantamiento de las voces que democráticamente piden por la construcción de un país con justicia para los pueblos.
Continuamos nuestro llamado a la solidaridad internacional, pues sabemos que únicamente a través del seguimiento permanente a la situación que vive Honduras, y la visibilización de la violación de los derechos colectivos de los pueblos y sus derechos humanos, será posible enfrentar la impunidad reinante, y trabajar juntas/os por la defensa de la vida, de la libertad y de la dignidad del pueblo hondureño, que es al mismo tiempo la lucha por la dignidad de nuestros pueblos latinoamericanos y del mundo.
Imagen: https://ciprodeh.org.hn