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La región latinoamericana ha vivido en el pasado reciente momentos complejos ante los avances e intentos de restauración del modelo neoliberal que conlleva estrategias fascistas en distintos países, en las que se combinan golpes de Estado, militarización, Estados de excepción, violencia contra las mujeres, racismo, violencia policial, y todas las atrocidades desarrolladas por las derechas ávidas de acumulación económica y política.
También, y no obstante la injusticia que soportan los pueblos latinoamericanos, ha resurgido el espíritu de lucha, la solidaridad internacionalista, victorias electorales de pueblos aguerridos como el boliviano. Hay un creciente espectro de resistencias -como la del pueblo chileno que resultó victorioso en su proceso para cambiar la Constitución impuesta bajo la dictadura de Pinochet, la construcción de un Referendo en Uruguay frente a la Ley de Urgente Consideración (LUC) impulsada por el actual gobierno de derecha, la nueva ola de movilización social en Colombia, entre otras-, y un conjunto de acciones que proyectan la continuidad de los levantamientos democráticos por la dignidad, que el año anterior surgieron en la región como respuesta a los intentos de control hegemónico desde el capital transnacional y sus gobiernos de bolsillo.
Con este Boletín electrónico, Amigos de la Tierra América Latina y el Caribe (ATALC) quiere reconocer el trabajo de los movimientos sociales, que durante estos meses no han cesado en su esfuerzo por apoyar a las organizaciones y pueblos que tanto lo han necesitado para enfrentar el Estado de excepción y los autoritarismos que ha conllevado, y que han demostrado la fortaleza de las clases populares para enfrentar las adversidades y trabajar colectivamente y en solidaridad internacionalista por una vida digna.
Asimismo, queremos difundir al interior de la región y hacia otros continentes las experiencias de lucha y resistencia que en octubre se han realizado y articulado desde los grupos de ATALC, también con y desde organizaciones aliadas. Sabemos que la solidaridad fortalecerá nuestros caminos y la construcción de proyectos populares emancipatorios, más si logramos aprender colectivamente en el intercambio de nuestras experiencias y estrategias, y las difundimos ampliamente.
Hacemos un agradecimiento especial a la Jornada Continental por la Democracia y contra el neoliberalismo, a todas sus organizaciones, por su constante empeño y trabajo mancomunado por la defensa de los derechos de los pueblos, de los territorios y medios de subsistencia. También por su construcción de la democracia y su defensa de la misma en los países que la han mantenido o conquistado en oposición al mandato corporativo transnacional y los ataques coordinados de la derecha fascista regional.
